Kentia, la palmera de interior que tienes que conocer

Descubre las condiciones de riego, iluminación y temperatura que requiere una palmera kentia, una de las plantas de interior más apetecidas en la actualidad.
Kentia, la palmera de interior que tienes que conocer

Última actualización: 20 agosto, 2021

La kentia es una palmera de interior que, pese a su tamaño, ha ganado terreno en mucho hogares. Sus hojas grandes y verdes, se han convertido en todo un atractivo. Por ello, en este artículo hablaremos sobre sus características y cuidados especiales.

Características de la kentia

El nombre científico de la kentia es howea forteriana y pertenece a la familia Arecaceae. Es originaria de la isla tropical Lord Howe, al este de Australia, y se adapta muy bien a espacios internos y externos. Aunque su nombre común es palmera kentia, es en realidad un árbol, de cuyo tronco brotan entre 3 y 10 palmas.

Su capacidad para crecer en diferentes tipos de suelo hace que crezca en muchas partes del mundo, por lo que podrás tenerla en tu casa con ciertos cuidados. Además de sus hojas verdes y anchas, tiene unos frutos de color rojizo y del tamaño de un huevo mediano que llaman mucho la atención, debido al contraste que se da entre los dos colores.

Según artículos, la kentia se viene usando como planta ornamental desde el siglo XIX, en la época victoriana. Crece con mayor comodidad en zonas templadas, entre los 14 y 25 grados centígrados. Pero esto no quiere decir que no se adapte bien a la sombra, este es un ambiente que esta planta también disfruta y la hace perfecta para estar dentro de la casa.

Cuidados de la kentia

Cuidados especiales de la palmera.

La palmera kentia es resistente, pero necesita de ciertos cuidados para crecer sana y fuerte, así como para mantenerse siempre radiante, algo fundamental en cualquier tipo de planta de interior. Sigue leyendo porque te hablamos sobre la cantidad de riego y luz que necesita.

Riego

Considerando su origen, la kenia es una planta de poco riego. El exceso de humedad genera la aparición de manchas en las hojas, pérdida de color y hojas secas. Es tan grave pasarse con el riego que la planta puede llegar a morir. Ahora bien, cuando hay falta de riego, notarás que las hojas de ponen amarillas.

Como cualquier tipo de planta de interior, la kentia no es ajena a los estragos del verano, siendo esta una época en donde hay que estar más atentos a las condiciones del sustrato para brindar un buen riego.

Iluminación

Contrario al riego, la palmera kentia sí necesita de iluminación natural de calidad para crecer mucho mejor. Sin embargo, si tu salón no tiene muchas entradas de luz, no es una barrera, puedes tener tu kentia, aunque crezca un poco más lento.

Otro de los requerimientos de la kentia es que no admite cambios de ambiente bruscos. Lo ideal es que si la vas a trasladar de una zona luminosa a una con sombra, lo hagas paso a paso, de modo tal que la planta tenga tiempo para adaptarse.

Temperatura adecuada

La palmera kentia se adapta muy bien a diferentes climas, pero disfruta más de temperaturas constantes que rodean los 24 grados centígrados. Pese a que podría soportar heladas moderadas que no superen los menos 4 grados centígrados, la planta podría sufrir daños.

Enfermedades de la kentia

Cuida la temperatura de la kentia.

Uno de los aspectos más relevantes que debes conocer sobre la kentia son las enfermedades que puede padecer. Las principales afectaciones se generan por exceso de riego, el cual provoca hongos y manchas en las hojas. Por ello, resulta conveniente revisar el sustrato para identificar si necesita o no riego.

Además de estas afectaciones, es necesario estar atentos porque la cochinilla algodonosa y la araña roja son plagas que disfrutan mucho de esta planta. Su aparición se da con mayor frecuencia en el verano, así que es mejor estar alerta en esta época y aplicar un fungicida natural una vez al año.

Kentia, decora de forma natural tus espacios

La palmera kentia es ideal para decorar de forma natural tus espacios. Queda muy bien en pisos pequeños y grandes, aportando color y frescura. Ahora sabes cómo cuidarla y cuáles son sus requerimientos básicos, así que atrévete y ábrele un lugar en tu hogar.

De vez en cuando, limpia las hojas para que brillen con mayor intensidad y, si identifiques que hay hojas secas que no se puedan recuperar, ayúdale a la planta y córtalas para evitar que atraigan plagas.



  • Pauner, M. La kentia, una palmera de interior. Horticultura ornamental, flores, plantas y árboles. Núm. 150.