6 trucos infalibles para ganar espacio en tu salón

Ya no vale decir que tu salón tiene pocos metros cuadrados. Con estos trucos, verás como se multiplican y, de golpe, parece más grande.
6 trucos infalibles para ganar espacio en tu salón
Goretti Ayubes

Escrito y verificado por la interiorista Goretti Ayubes.

Última actualización: 18 julio, 2020

Si quieres ganar espacio en tu salón y hacer que parezca mucho más amplio de lo que realmente es, estás de enhorabuena porque, a continuación, descubrirás algunos trucos infalibles.

El buen uso de las tapicerías, las puertas correderas, los muebles bajos y otros recursos decorativos te ayudarán a cumplir el objetivo. ¡Te lo prometemos! ¿Estás listo?

Ganar espacio en tu salón: 6 trucos que te encantarán

Tapicería romántica.

1. Busca la luz en las telas

Tanto para las cortinas como para las tapicerías, te aconsejamos utilizar telas claras, de un color liso o con estampados pequeños, que amplian visualmente y dan más luz.

En salones muy pequeños y con poco iluminación, elige todas las telas engamadas, sin apenas contraste. Para que no resulte aburrido, combina diferentes acabados y texturas (linos, algodones, terciopelos…)

También, te recomendamos ganar profundidad jugando con diferentes planos de color. Por ejemplo, tapiza el sofá en un tono algo más oscuro que las butacas.

2. Baldas altas para libros y detalles decorativos

Te animamos a aprovechar la arquitectura para integrar  muebles a medida de líneas rectas que aumenten la sensación de espacio y conviertan tu salón en una estancia muy bien aprovechada.

Una balda de pared a pared a escasa distancia del techo, con cestos  y cajas con tapa, te proporcionará mucho espacio para guardar pequeños objetos sin ocupar metros útiles.

Para colocar tus libros, no necesitas estantes de más de 25 o 30 cm de fondo. Así que, usa estos para aprovechar las esquinas y los retranqueos de la pared. Si pones varios, deja un espacio de 35 o 40 cm entre ellos.

3. Ganar espacio en tu salón prescindiendo de la mesa de centro

Mesas nido
Imagen: amazon.es

Más que una ayuda, en un salón con escasos metros cuadrados, la mesa de centro será un estorbo; sobre todo si tienes niños, porque les gustará jugar donde tú estés.

Mejor coloca unas mesas nido al lado del sofá; y muévelas hacia el centro del salón cuando las necesites, verás que útiles te resultan, ya que ganarás espacio en esa zona.

Y si tu prioridad es tener un sitio donde guardar los mandos del televisor, las gafas, las velas, las revistas… pon junto al sofá un pequeño book auxiliar con puertas.

4. Pasos sin puerta o con correderas de cristal

Retira la puerta del salón. Es una forma rápida y económica de agrandar el espacio sin obras. Al permitir que la vista alcance varias estancias, ganas profundidad y sensación de espacio.

Te recomendamos eliminar las puertas entre el salón y el comedor o el recibidor, y dejar un vano bien acabado y decorativo que te genere una buena comunicación visual.

Si quieres mantener la independencia o evitar que se escapen el aire acondicionado o la calefacción, cierra el salón con una puerta corredera de cristal; no ocupa demasiado espacio cuando se abre y asegura la misma sensación de luz y amplitud.

5. Aprovecha la trasera del sofá con un escritorio

Ganar espacio en tu salón
Imagen: pinterest.es | Poliform|Varenna

Una consola o una mesa adosada a la trasera del sofá es una buena solución decorativa para integrar un rincón de trabajo en un salón pequeño. ¡Verás qué buena idea!

Bastan 40 cm de fondo y 1 metro de ancho para revisar papeles, escribir cómodamente o apoyar tu PC. Además, puedes aprovechar el hueco de debajo para esconder un par de pufs que sirvan de asiento extra.

Integrada en la pared, a medida del hueco, te proponemos colocar una estantería con una balda volada a modo de escritorio. Te puede servir para guardar libros o archivadores.

6. Ganar espacio en tu salón jugando con el blanco y el beige

Este es el dúo ganador para atrapar la luz. Es una combinación perfecta porque consigues dos objetivos: ganar claridad y a la vez generar un espacio de lo más acogedor.

Lo que logras con el blanco es alejar las paredes, aligerar los volúmenes y conseguir más luz natural, lo que amplia la sensación de espacio y de relax. Si el blanco puro te resulta demasiado frío, puedes elegir un gris muy claro.

El color beige da calidez. Los toques de beige en telas, en pequeñas piezas de mobiliario o en complementos decorativos como lámparas, enriquecen la decoración.

¿Qué te han parecido nuestros seis trucos? Seguro que muchos de ellos te servirán para hacer de tu salón esa estancia amplia y luminosa que a todos nos gustaría tener.

Foto de Houzlook .com en Pexels