Las gardenias y su aroma que enamora

Descubre cómo cultivar y cuidar de las gardenias, así como el origen de su encantador perfume.
Las gardenias y su aroma que enamora

Última actualización: 11 noviembre, 2021

Las gardenias son plantas tipo arbusto de hojas muy verdes y unas flores encantadoras, por su belleza y aroma. Son una especie de flora ideal para cultivar en jardines abiertos o en macetas. No obstante, su mayor nivel de crecimiento, que supera los 150 centímetros, se da cuando se siembran en tierra.

En este artículo vamos a contarte los detalles más relevantes sobre esta hermosa planta. De entrada, debes saber que requiere un poco más de dedicación que la mayoría de las plantas de jardín.

Las gardenias: apetecidas por su aroma

Cuidados de las gardenias.

Originarias del sur de China, las gardenias tienen unas hojas muy verdes y brillantes en forma lanceolada. Sus flores son hermosas, parecidas a las rosas, pero un poco más abiertas y menos delicadas. Suelen ser de color blanco crema y varían entre los cinco y los 12 pétalos. Sin embargo, su mayor atractivo es el delicioso olor que segregan y que evoca al jazmín.

El aroma de las gardenias es tan popular que tiene su propia canción: “Perfume de gardenias tiene tu boca…”. Es tan penetrante que impregna fácilmente una habitación. Su nombre científico es Gardenia jasminiodes, el cual revela de dónde viene ese delicioso aroma: las gardenias pertenecen a la familia de los jazmines.

¿Qué significado tienen las gardenias?

Según la tradición oral en algunas comunidades, las flores de las gardenias tienen relación con la pureza, la limpieza y con la espiritualidad. Propiamente en China, estas están muy ligadas a la feminidad.

También se cree que ayudan a atraer energías purificantes y que contribuyen a mantener la concentración durante la meditación. Por otra parte, suelen usarse para adornar las ceremonias de matrimonio, ya que se dice que atrae el amor y la seducción.

Las gardenias y sus cuidados

Las gardenias pueden cultivarse en la terraza, el jardín o en interiores, siempre y cuando tengan un buen baño de luz cada día. Este es quizás el requerimiento más importante respecto a su cuidado, requieren de luz solar para tener unas hojas y flores fuertes.

Continúa la lectura porque vamos a contarte cuáles son esos otros cuidados que debes seguir si deseas cultivarlas en casa.

Requieren de un sustrato ácido

Las gardenias son plantas acidófilas por lo que requieren de un sustrato ácido para desarrollarse mejor. De lo contrario, no absorberán los nutrientes que necesitan y sus hojas se tornarán amarillas.

Cuando vayas al vivero a comprar tus gardenias, pregunta al experto por un sustrato de cerezo o de castaño. Ten presente que la tierra también deberá tener buena materia orgánica para que soporte la humedad y permita que las raíces se aireen.

Riego de las gardenias

Las gardenias necesitan un riego constante, no les resulta atractivo un sustrato seco por completo. Aunque esto no quiere decir que el exceso de riego sea permitido, pues puede dar paso a hongos y puede podrir las raices. También es muy importante que el agua con el que riegas tus gardenias no tenga altos índices de cal porque esto puede cambiar el pH del sustrato.

Abono

Cuidados de las gardenias

El abono mantiene nutrido el sustrato de tus gardenias, por ello es fundamental aplicarlo cada tanto, más cuando la planta está en maceta. Debido a las condiciones de esta mata, hay que aplicar abonos para acidófilas que suelen venir líquidos y se mezclan con el agua de riego.

Poda de las gardenias

El mejor momento para realizar la poda anual o de floración de las gardenias es cuando inicia la primavera en las zonas frías y en otoño en los lugares cálidos. La poda de mantenimiento, aquella que se efectúa para eliminar hojas secas o dañadas, se ejecuta durante todo el año.

Ahora bien, también existe la poda de rejuvenecimiento y se hace cuando la planta es vieja y ha dado ya varias floraciones. Como su nombre lo indica, busca rejuvenecer la planta, para lo que se requiere de cortar muchas hojas y flores, por ello la planta debe estar bien nutrida, para que pueda recuperarse bien.

Plagas y enfermedades

Por último, encontramos que las gardenias son susceptibles a plagas como el pulgón, la cochinilla y la araña roja. El jabón potásico es muy bueno para eliminar este tipo de animalitos. Valga la pena recordar que el déficit de luz, el exceso o la falta de riego, así como un mal cuidado provoca enfermedades en estas hermosas plantas.

¿Te animas a cultivar gardenias?

Como puedes darte cuenta, las gardenias requieren de cuidados especiales aunque no son imposibles de cumplir. A cambio, obtendrás una planta sana, vibrante y un aroma que enamora, relaja y tranquiliza. Lo mejor es que puedes tenerla dentro o fuera de casa. Anímate y cultiva las tuyas.