Cocinas ocultas: ideas y opciones
En los últimos años el diseño y la estructura de los pisos ha cambiado dando paso a ideas innovadoras como las cocinas ocultas. Este concepto está en tendencia y busca aprovechar mejor los espacios. Hay diferentes opciones para ocultar las cocinas, entre ellas las puertas tradicionales, las abatibles y las correderas.
De esta forma, cada vez que lo necesites vas a poder esconder tus elementos de cocina y nadie sabrá que están detrás de dichas puertas. Sigue leyendo para descubrir los beneficios de este tipo de cocinas y qué opciones puedes elegir.
Beneficios de las cocinas ocultas
Si quieres cambiar un poco el diseño de tu hogar y te llaman la atención las cocinas ocultas, es necesario que conozcas cuáles son sus beneficios.
Al ser algo novedoso es poco común encontrar casas que ya tengan incorporado este diseño. Lo cual no aplica tanto a los pisos pequeños o tipo loft, en los cuales sí son más comunes y pretenden optimizar el espacio disponible.
Son económicas
La instalación de las cocinas ocultas no suele ser costosa, pues solo se requiere de un par de puertas que se instalan como un cajón más de la cocina. Aunque esto puede variar según el mecanismo de apertura, siendo las abatibles las que más inversión requieren.
Optimizan espacio
El mayor beneficio que tienen las cocinas ocultas es que optimizan el espacio y generan más amplitud al lugar donde se sitúan.
Si te molestan las barras o islas que se usan de forma tradicional en las cocinas, podrás prescindir de ellas. En su lugar podrás ubicar un comedor o un juego de sala que armonice mejor con el espacio cuando cierres las puertas de la cocina. Esto es perfecto cuando tienes un piso pequeño.
Mayor orden
Al tener una cocina oculta se genera una necesidad especial de mantener todo en orden. Así, cuando las puertas se abran todo armonizará mejor. Cuando se echa mano de este tipo de diseños es imprescindible tener cajones para guardar de forma ordenada elementos como las ollas, los platos, las cucharas y las especias, entre otros.
Ideas y opciones para escoger una cocina oculta
Aunque las cocinas ocultas no suelen ser muy comunes, te traemos algunas ideas que pueden guiarte para elegir la tuya. Hay diferentes tipos y estilos de puertas, lo recomendado es elegir la que se acomode a tus gustos personales y a la decoración de tu piso.
Cocinas ocultas con puertas abatibles
Las cocinas ocultas con puertas abatibles son las más comunes. Esto porque es el mecanismo de apertura más usado en las cocinas tradicionales.
Las puertas abatibles se caracterizan por tener un sistema de apertura que evita que se cierren solas. Su ventaja es que al instalarse quedan dispuestas como la puerta de un armario que abres y cierras cuando lo necesitas.
Con puerta corredera
Las puertas tipo corredera de puertas en las cocinas ocultas son las más cómodas de usar. Para tener acceso a la cocina solo debes deslizar la puerta hacia la derecha o la izquierda, según la hayas instalado. Esto hace que no necesitemos espacio para abrirla, como sucede con las abatibles.
Es importante tener un buen aseo a los carriles de la puerta para que no se acumule el polvo y se vuelva difícil de abrir.
Cocina oculta con puerta de acordeón
Las puertas tipo acordeón son una buena opción si quieres una puerta cómoda y original. Estas se usan principalmente para las cocinas ocultas lineales, o sea que estén sobre una sola pared hacia la misma dirección. Funcionan plegando una o dos de sus caras para abrirlas o cerrarlas.
Cocina oculta con puertas escamoteables
Las puertas escamoteables tienen un sistema de apertura que sirve para guardar las puertas de la cocina oculta en paralelo a esta. Incorporan una tecnología de frenado en el cierre y su mayor ventaja es que no suelen ser muy grandes. Más bien están divididas en pequeños cuadrantes para hacer más fácil su manejo.
Sus diseños tienen una estética muy llamativa, son elegantes y modernas. Por lo general, es común encontrarlas en color blanco. A simple vista parecen una alacena.
Puertas abatibles con abertura hacia arriba
Las puertas abatibles de apertura hacia arriba son similares a las puertas de garajes, de las que se abren empujándolas hacia arriba. Estas tienen una desventaja y es que si la persona es muy alta o no hay mucho espacio, la puerta no podrá desplazarse bien.
Al abrirlas quedan posicionadas hacia arriba y solo hace falta halarlas hacia abajo para cerrarlas.