Todo lo que necesitas saber sobre el cuidado de los suelos de madera

Nadie puede negar que los suelos de madera son los más bonitos que existen, pero también es cierto que necesitan de ciertos cuidados y mantenimiento.
Todo lo que necesitas saber sobre el cuidado de los suelos de madera

Escrito por Equipo Editorial

Última actualización: 02 abril, 2019

Los suelos de madera son bonitos, elegantes y sofisticados. Pero requieren de mayores cuidados en comparación con, por ejemplo, los cerámicos o porcelánicos.

Igualmente, no es cuestión de preocuparse, ya que existen ciertas técnicas que te permitirán disfrutar de tus pisos de madera todo el año. ¡Sigue leyendo este artículo para enterarte de cuáles son!

Características de los suelos de madera

Suelo de madera rayado.

La madera es el material natural más usado en la construcción y decoración de los hogares desde hace siglos. En la actualidad, los suelos de madera convierten una vivienda en más elegante cálida.

Uno de los principales problemas de los pisos de madera es que se trata de un material un tanto delicado. Por ejemplo, se rayan con mayor facilidad, es necesario encerarlos y su mantenimiento puede llevar consigo gastos adicionales.

Sin embargo, nadie puede negar que entrar a una casa donde los suelos de madera relucen nos predispone de otra manera. Nos dan ganas de descalzarnos o de sentarnos en el piso y de admirar más de cerca tal belleza. Por supuesto, esa belleza tiene un coste que debemos analizar al momento de elegir qué tipo de suelo queremos.

Tips para cuidar suelos de madera

Te acabas de mudar a una casa donde los pisos son de madera, o bien tienes pensado cambiar los existentes de tu vivienda. Y seguramente has pensado que los suelos de madera son muy complicados de mantener.

Es verdad que requieren de ciertos cuidados, pero lo bueno es que los efectos son extraordinarios. Solamente requieren de unos cuidados específicos para que la madera se mantenga siempre como el primer día.

1. Protege el suelo del agua y la humedad

Agua en suelo de madera.

A diferencia de los cerámicos, la madera absorbe la humedad ambiente y también el agua o líquidos que caen encima. Para evitar grietas o que se despeguen las tablas de madera, lo ideal es que la humedad de la vivienda se mantenga entre un 35 y un 60% todo el año. Usa para ello humidificadores o pastillas antihumedad, dependiendo de lo que necesite tu casa.

2. Hazles un mantenimiento periódico

Limpiar el suelo de madera.

Los suelos de madera requieren de un mantenimiento semanal como máximo (hay quienes dicen que debe limpiarse día sí, día no). Barre o pasa el aspirador para acabar con la arenilla, el polvo o la suciedad. Después pasa una mopa de algodón bien seca.

Adicionalmente, te recomendamos que cada dos semanas realices una limpieza más profunda, con productos especiales para suelos de madera que suelen tener un pH neutro. Recuerda secar bien para evitar el paso de la humedad.

3. Atención con el contacto con el sol

Sol en contacto con la madera.

No estamos hablando de los suelos de madera en exteriores únicamente, ya que los de interior reciben los rayos del sol a través de puertas y ventanas. ¡Y pueden dañarse! Para preservarlo, te aconsejamos que apliques una pantalla especial que filtre los rayos UV.

A su vez, te recomendamos que de vez en cuando cambies los muebles de lugar, para evitar que en ciertas áreas estén opacos o manchados, ya que la madera se decolora con el uso prolongado del sol.

4. Barniza una o dos veces al año

Barnizar suelos de madera.

Los suelos de madera necesitan ser nutridos e hidratados con productos específicos. El barniz suele ser una opción bastante acertada para conseguir que el material quede como el primer día.

Ten en cuenta que los pisos tratados con aceites deben ser nutridos con ceras o aceites de mantenimiento, y para limpiarlos, optar por jabones con aceites.

5. Arregla los desperfectos

Reparar el suelo de madera.

El día a día hace que los suelos de madera presenten ciertas heridas de guerra, sobre todo si en casa hay niños o mascotas. Una buena forma de eliminar estas marcas es con un rotulador de retoques (se compra en tiendas especializadas) que permite disimular los arañazos leves. Consigue el color que más se parezca al original y asunto resuelto.

Si el suelo presenta huecos o grietas, es preciso repararlos con una masilla para madera, lijar y, por último, pintar o barnizar.

Para conseguir que tus suelos de madera se mantengan en excelente estado por más tiempo te recomendamos que no camines con tacones por casa, que evites que tus hijos jueguen con coches o balones en el interior del hogar y que coloques cortinas que reduzcan el paso del sol directo al suelo.