Estanterías de madera: diseños y formatos

A la hora de amueblar el hogar, debemos tener presente los distintos modelos de estanterías de madera y las estéticas que proporcionan en los interiores.
Estanterías de madera: diseños y formatos
Francisco Jiménez

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez.

Última actualización: 29 septiembre, 2020

Las e stanterías de madera suelen tener presencia en los hogares, ya que aportan diseños y formatos que resultan muy interesantes para los diseños interiores. La variedad es muy amplia, por lo que merece la pena detenernos a analizar las distintas posibilidades que hay en el mercado.

A todos nos gusta tener bien recogidos los libros, poner fotografías para adornar, colocar algunas plantas, etc. Para ello, necesitamos soportes que sirvan para la organización interna. Es la mejor manera de conseguir una apariencia vistosa y refinada.

Antes de utilizar las estanterías, debemos tener en cuenta las medidas y el número de baldas. La finalidad es que se convierta en un mueble más que colabore en la armonía del conjunto. Por tanto, vamos a conocer más de cerca este recurso para el hogar.

El formato básico para dormitorios y salones

Estanterías de madera: diseños y formatos

Si no queremos complicarnos la vida, tenemos la posibilidad de utilizar un formato básico que, en el fondo, no desentona y encaja en cualquier estilo. No deja de ser un componente funcional que se adapta a cualquier espacio sin generar ningún tipo de tensión estética.

Las estanterías de madera no solo son utilizadas como soporte, también se consolidan bajo un principio decorativo verdaderamente interesante. De todas formas, no solemos otorgarles demasiado protagonismo ni tampoco buscamos en ellas un bien indispensable.

Nuestro objetivo fundamental es, concretamente, que sea un mueble más de la decoración. Aquellas que son sencillas y básicas se conforman por baldas separadas y se amoldar perfectamente a cualquier estancia, ya que pueden ser grandes, pequeñas, estrechas o alargadas.

Deben complementarse con el resto del mobiliario sin generar tensión estética.

Diseños complejos y sofisticados

La contraposición al modelo anterior son las estanterías de madera con diseños y adornos en las superficies. También, están los grupos que se caracterizan por tener diferentes estructuras con las que crear una imagen más original y distinguida. Veamos algunos ejemplos interesantes:

  1. Una escalera antigua en desuso puede convertirse en estantería. Simplemente, hay que disponer algunas baldas que sobresalgan en cada escalón y, a partir de ahí, convertirla en una estructura ordenada que atraiga todas las miradas por su apariencia singular.
  2. Otro caso especial son las que tienen una forma específica. Por ejemplo, aquellas que simulan el perfil de una casa, las que tienen forma de letra o las que representan un animal o una figura.
  3. Un modelo que ha ganado mucho éxito en los últimos años ha sido la estantería con forma de árbol; es decir, simplificando su silueta, con ramas que funcionan como baldas pero que goza de un formato irregular.
  4. También, están las que se organizan por módulos amplios o reducidos; es decir, existen distintos pisos en los que se disponen los espacios, siendo ideal para crear una librería.
  5. Las cajas recicladas que habían quedado en desuso y que, finalmente, han adquirido una condición estética que resulta muy peculiar. De esta manera, podemos trabajarlas según nos convenga y podemos conseguir un aspecto vintage.

Estanterías de madera colgadas con cuerdas

Estantería colgante con soga

Para proporcionar al hogar un toque más sofisticado e innovador, las estanterías colgadas por cuerdas son una buena elección. ¿Qué pueden aportarnos? Fundamentalmente, generan un carácter diferente a lo que normalmente estamos acostumbrados.

Se cuelgan de la pared o del techo con una cuerda que sujeta individualmente cada balda de madera. Es importante que no quede como un péndulo ya que, si hay corrientes de aire, corre peligro de balancearse.

Lo mejor es que queden bien ancladas a las paredes. La idea es que no pierdan la funcionalidad; sin embargo, reciben un sentido mucho más original en comparación con otro tipo de estanterías.

Combinación de metal y madera

Cabe la posibilidad de que encontremos estanterías con una estructura metalizada y el resto de estantes en madera. Este formato es bastante habitual, sobre todo para amueblar pisos de estudiantes, el cuarto del hijo o casas modernas.

Indudablemente, nuestra perspectiva es que reciba cierto reconocimiento estético pero que tampoco se convierta en una pieza protagonista. Por este motivo, este modelo es muy apropiado para el despacho, los dormitorios, los pasillos y los salones.

En definitiva, cualquier opción de las que hemos visto en el presente artículo se puede utilizar para los interiores, la cuestión está en que combinen correctamente con el resto de recursos decorativos.



  • Ventura, Anna: 1000 ideas prácticas en decoración del hogar, Universe Publishing, 2003.