Colores que transmiten sensación de higiene

La limpieza no solo es una acción que realizamos en el hogar, también es una sensación que podemos percibir a través de la decoración; de ahí, la importancia de escoger adecuadamente los colores.
Colores que transmiten sensación de higiene
Francisco Jiménez

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez.

Última actualización: 27 octubre, 2020

La decoración de un espacio se rige, fundamentalmente, al tipo de función que va a tener. Escogemos el mobiliario y los recursos necesarios para equiparlo, al igual que los cromatismos que estarán presentes y que también ofrecen un significado; por eso, vamos a conocer los colores que transmiten sensación de higiene.

Cada una de las estancias de la casa tiene una finalidad. En algunas, pasamos nuestros ratos de ocio, en otras, de descanso y, por otro lado, se encuentran aquellas que se emplean para el aseo personal y la preparación de alimentos.

Nuestra misión es acondicionar adecadamente cada una de ellas y que exista una sintonía evidente con el uso que se les da, sin perder la armonía general del hogar y proporcionando personalidad. De este modo, conseguimos un ambiente práctico y cómodo.

Los colores transmiten sensaciones

Desde pequeños se nos ha enseñado a asociar los colores a ciertos aspectos de la vida y la naturaleza. Además, nos solemos identificar con algunos de ellos, escogiéndolos como los favoritos que, a su vez, pueden incorporarse en nuestras vidas a través de la ropa o la decoración del hogar.

Los más oscuros pueden generar ambientes lúgubres, los cálidos son más hogareños y vivos, los fríos ofrecen otra visión más activa y cordiales, mientras que los neutros se configuran como los más básicos que combinan perfectamente con el resto.

De la misma manera, podemos abrir otra categoría que son los higiénicos; es decir, aquellos que transmiten sensación de limpieza. En este grupo, se encuentran la gama de blancos, azules y verdes claros o, incluso, algunos tonos pastel.

En el fondo, todo esto es un factor psicológico. Para lograr este propósito debemos tender hacia tonalidades claras y relucientes, sin generar oscuridad. Este aspecto hay que tenerlo en cuenta de cara a cumplir con el objetivo.

La limpieza no solo es una acción física, también es psicológica.

Los colores y su aplicación en estancias de la casa

En un principio, conviene saber que al acceder a una habitación comenzamos a percibir un cúmulo de sensaciones de forma instantánea. Esto viene dado por los colores que estén presentes, lo que consideramos como la cromaterapia. Veamos algunas estancias donde trabajarlos:

  1. En el baño, es indudable que el blanco juega un papel primordial. A través de la cerámica y los sanitarios queda presente; incluso, se relaciona muy bien con cualquier otro, favoreciendo ese ambiente higiénico y fresco que tanto precisamos.
  2. Del mismo modo, podemos decir que la cocina es otro de los espacios donde el blanco puede tomar protagonismo; sin embargo, también encajan otros como los azules, los verdes, los terrosos claros, los grises en los electrodomésticos, etc.
  3. La entrada es el acceso a la vivienda y, por tanto, ofrece un primer mensaje sobre cómo será el resto del conjunto. No cabe duda de que es aquí donde podemos mostrar un primer acercamiento a nuestros gustos utilizando tonos como el salmón, el verde pistacho, etc.

El ambiente neutro: un componente básico

Sofá beige claro.

Para lograr esa sensación de higiene, tenemos la posibilidad de utilizar colores neutros. Los grises son, por ejemplo, los más recurrentes, convirtiéndose en la base fundamental para combinar, relacionar o para que domine en un espacio.

En el fondo, no desentona ni genera tensión, sino todo lo contrario. La templanza queda presente y se aplica esa sensación de limpieza, siempre y cuando no sea demasiado oscuro; por eso, puede quedar muy bien si se combina con otros blancos.

Lo mismo podemos decir del color crema o el beige : no llegan a ser tonos cálidos, sino que tienden a ser más bien apagados y pasan desapercibidos. Si se aplican en el salón, el dormitorio o el comedor, son un auténtico acierto.

El azul-verdoso: naturalismo e higiene

Uno de los más empleados en el ámbito público, como hospitales, clínicas y centros de salud, es el azul-verdoso. ¿Qué ocurre con este color? Se convierte en un componente funcional y lanza un mensaje a nuestra mente: espacio limpio y puro.

En realidad, nos recuerda al ambiente del campo, donde se percibe frescura y desasosiego. Así, toma protagonismo en lugares como el baño, la cocina o el dormitorio.

En definitiva, tenemos una amplia gama de colores cuyo propósito no es solo transmitir una sensación, sino también influir en las emociones y emitir un significado: la sensación de higiene.



  • Lluch, Francisco Javier: Arte de armonizar los colores, Barcelona, Imprenta de El Provenir, 1858.
  • Sudjic, Deyan: La luz y el color en la decoración, Folio, 1992.