Claves para montar un gimnasio en casa y estar en forma
Si hay algo que te mantiene sano, fuerte y joven, es la actividad física. Puede que en los últimos tiempos hayas dejado de hacer ejercicio o que prefieras no hacerlo en sitios públicos; por eso, te proponemos montar un gimnasio en casa, ¿te animas?
No necesitas hacer una inversión exagerada, ni siquiera contar con un espacio demasiado grande, lo único que requieres es el entusiasmo y las ganas de ponerte en forma.
La importancia de montar un gimnasio en casa
Este último año ha hecho que las rutinas hayan cambiado radicalmente. Se ha empezado a trabajar desde la casa, las salidas se han visto reducidas y, por supuesto, el ocio y la manera de practicar deporte también han cambiado.
Sin embargo, hay cosas que no se recomiendan dejar de hacer y una de ellas es el ejercicio físico. Los beneficios que este aporta para el bienestar físico y emocional son innumerables y, por ello, te proponemos que te animes a montarte un pequeño gimnasio casero.
Existen muchas plataformas que te asesoran online para que lleves a cabo tu actividad favorita, bien sea yoga, cardio, HIT o un entrenamiento de fuerza con pesas. De esta manera, estarás siempre acompañado de los mejores especialistas, aunque sea de manera virtual.
Dónde puedes poner un gimnasio en casa
Si eres de los que cuenta con una habitación extra en casa que nunca usas, estás de suerte. Muchas veces se suele utilizar como un espacio multiusos para poner la ropa de plancha o para dejar todos aquellos trastos que no se usan tan a menudo. Pues bien, ha llegado el momento de darle sentido para ponerte en plena forma.
Lo más conveniente es que tenga luz natural y que sea lo más amplio y diáfano posible. De esta forma, podrás moverte con facilidad sin estar chocando con todo. Te sugerimos que incluyas algún sistema de almacenaje; de este modo, podrás guardar tus accesorios cuando no los uses.
Si por el contrario tu casa es demasiado pequeña y no puedes dedicarle una habitación entera al gimnasio, necesitas soluciones prácticas y ligeras. Puede que vayas a tener que mover algún mueble para despejar la zona cada vez que quieras hacer ejercicio, busca que sean piezas ligeras y fáciles de apartar.
Soluciones prácticas para montar tu gimnasio en casa
Para conservar el orden, como te decíamos anteriormente, es imprescindible tener algún elemento que te permita recoger tu equipo. Puede ser un armario, una estantería o un rincón que puedas ocultar con un biombo, pero es fundamental marcar límites antes de que te invada el caos.
No es necesario que te compliques la vida: unas barras de cortina en la pared pueden se la solución para colgar tu equipo: las cuerdas, las gomas, las mancuernas, etc. Así, lo tendrás todo a mano y en su lugar.
Otra opción es utilizar cajas. Elige unas bonitas, ya que también serán parte de la decoración. Estas de IKEA son ideales, ¿no te parece?
El equipo básico que necesitas
Independientemente del espacio que tengas para montar tu gimnasio, necesitarás ciertos materiales para realizar tus rutinas de ejercicios y te diremos cuáles son los básicos.
Si tienes la posibilidad en cuanto a espacio e inversión, hazte con alguna máquina para hacer cardio. Puede ser una bicicleta estática o una cinta de correr. Esto te dará la posibilidad de trabajar tu resistencia pulmonar.
También consigue una esterilla, unas mancuernas, un kettllebell, unas bandas elásticas para la tonificación muscular, una comba para saltar y una pelota de pilates, la cual es estupenda para ejercitar las abdominales.
Después, puedes añadir elementos a medida que vayas progresando, pero no te emociones y compres todo del tirón: ve poco a poco. Así, podrás decidir qué es lo que necesitas realmente.
Hacer ejercicio es fundamental para mantenerse sano en todos los niveles. No dudes en practicar el que te haga sentir mejor, pero recuerda que el sedentarismo es muy perjudicial para tu cuerpo y tu mente.
A medida que te sientas mejor, la motivación te llevará a dar pasos cada vez mayores en el compromiso por mantenerte activo. No dudes en consultar expertos antes de realizar cualquier actividad.