Barandillas de vidrio para el hogar
Las viviendas modernas suelen tener recursos que ofrecen un aspecto más innovador y contemporáneo. Se aprecia cierta tecnificación y la búsqueda de nuevos procedimientos que garanticen un ambiente actualizado; por eso, vamos a conocer cómo son las barandillas de vidrio para el hogar.
La depuración de las formas está ganando cada vez más terreno a los elementos decorativos barrocos y antiguos. En lugar de acudir a características clásicas que puedan estar pasadas de moda, se aplican diseños propios de ambientes urbanitas.
Ciertos materiales, como los metales o la madera, tienen un protagonismo particular en las casas. Son múltiples las fórmulas con las que pueden aparecer, pero también hay que tener presente que el vidrio puede ocupar un lugar importante si lo tratamos con personalidad.
En búsqueda de un ambiente cosmopolita
Hoy en día, queremos que nuestro estilo de vida se amolde a la sociedad actual; para ello, es imprescindible que utilicemos recursos que destaquen por sí mismos. Esto no quiere decir que ofrezcan un aspecto estridente o extravagante; en realidad, con un producto sencillo se pueden hacer muchas cosas.
Recargar los interiores con decoración no ayuda en absoluto. Esto puede provocar una saturación demasiado estricta que, a la larga, suponga un estrés visual que está completamente fuera de lugar; de ahí que seamos conscientes de las nuevas soluciones que se están aplicando en el mundo del interiorismo.
Las barandillas de vidrio encajan muy bien en los ambientes cosmopolitas. Son habituales en lugares públicos, tales como los edificios de la administración, las oficinas o los centros comerciales. Por este motivo, queremos que también gane presencia en las viviendas.
La modernidad es una cualidad que empieza a estar presente en las casas.
¿Dónde se puede ubicar?
A la hora de señalar los lugares donde se pueden ubicar, es preciso matizar que son polivalentes; es decir, tienen la capacidad de adaptarse a cualquier sitio de la casa, tanto en interiores como en exteriores. Vamos a extraer algunas ideas para saber qué posibilidades existen:
- Su disposición en las escaleras puede ser, probablemente, el mejor lugar. De este modo, quedan visibles y se comprueba la sensación de ligereza y sutileza, como si quedasen suspendidas en el aire. Esta es una de las cualidades más destacables que tienen.
- En los chalets, y más concretamente en los pisos superiores, pueden funcionar muy bien. Ofrecen unas características semejantes a lo que hemos comentado con las escaleras y siguen cumpliendo ese sentido de protección y delimitación de las partes del hogar.
- En las terrazas también tienen posibilidades; de hecho, quedan visibles desde la calle y se percibe así un carácter más liviano; es decir, no se emplea tanta materia opaca y ayuda a contemplar mayor profundidad desde el exterior. El nivel de transparencia se percibe de forma directa.
- Los porches también pueden ser una buena oportunidad de trabajarlas. Quizás es aquí donde no se emplean habitualmente, pero no hay que olvidar que todo es cuestión de estudiar y proceder donde sea preciso.
El vidrio templado, garantía de calidad
Este tipo de vidrio es fuerte y consistente, capaz de soportar todo tipo de inclemencias meteorológicas e, incluso, pequeños impactos. Posee un grosor considerable y tiene un tratamiento químico que permite aumentar la resistencia.
Se puede encontrar completamente transparente o tamizado ligeramente para guardar algo más de intimidad. No obstante, cualquiera de las dos fórmulas permite el paso de la luz.
No necesita soporte o complemento metalizado para reforzarlo; de hecho, puede quedar visible de forma natural. Además, queda muy bien estéticamente en cualquier parte de la casa. Encaja perfectamente en el estilo casual contemporáneo.
Una tipología que cada vez gana más terreno en el mundo de la decoración.
Barandillas de vidrio para la piscina
Una de las tendencias que cada vez tiene mayor presencia son las piscinas rodeadas de barandillas de vidrio. Generalmente, solemos encontrar un alambrado; sin embargo, podemos alcanzar otro grado de naturalidad y salir de los patrones comunes.
De esta manera, queda visible todo el recinto gracias al alto nivel de transparencia. Por tanto, se gana espacialidad, sin olvidar que esto es una sensación visual que percibimos y que ayuda a producir diafanidad.
En definitiva, estas barandillas son una buena apuesta para el hogar, no solo por las funcionalidad que ofrecen, también por contribuir positivamente en la decoración y por ser fáciles de limpiar.
- Avery, Anthony: Ideas y trucos para el hogar, Robinbook, 1997.
- Emma, Callery: Enciclopedia práctica de la decoración, Everest, 2001.