7 cosas que debes evitar si no quieres que tu casa luzca sin estilo
Existen errores de decoración que pueden hacer que tu casa luzca sin estilo, que parezca que no has planeado bien los recursos que vas a utilizar o que, más allá del precio de tus muebles y accesorios, dé la impresión de que son baratos y sin gusto.
Si no quieres que esto te suceda, abre bien los ojos y empieza a leer cuáles son esas señales que te indicarán que te has equivocado. Nunca es tarde para poner una solución.
Estos errores harán que tu casa luzca sin estilo
1. La monotonía: tu enemigo a eliminar
Una de las claves para lograr espacios personales y con una propuesta definida, es atreverse a mezclar muebles, texturas y colores de una forma armónica y elegante. Cuando lo haces, inmediatamente le das alma a tu hogar, independientemente de si has elegido una decoración low cost. No tiene que ver con el precio real de las cosas, sino con el aspecto del conjunto.
Huye de comprar mobiliario de una misma serie de la misma manera que lo haces al vestirte. ¿A que no te sueles comprar a juego el pantalón, la camisa y la chaqueta?
2. Cuidado con las plantas de plástico
Sabes lo mucho que gustan las plantas a la hora de decorar cualquier ambiente. Aportan luz, color, diseño y aire puro, pero si no quieres darle una oportunidad a aquellas que necesitan pocos cuidados, o no tienes intención de aprender los conceptos básicos de jardinería, las artificiales pueden ser una opción siempre y cuando sean de calidad.
Las plantas artificiales se dividen en dos grupos: aquellas que son de plástico y lucen bastante falsas, y las que son una réplica perfecta de las naturales. Estas últimas suelen tener un costo algo elevado, pero piensa que te van a acompañar por muchos años y que harán que tu casa luzca con mucho más estilo.
3. Las alfombras pueden hacer que tu casa luzca sin estilo
Las alfombras aportan muchísimo a la decoración de cualquier atmósfera, sin importar de qué espacio se trate. Visten, dan calidez, armonizan y añaden mucho confort.
Sin embargo, hay que saber elegirlas bien y esto no se refiere únicamente a los colores y las texturas sino, también, al tamaño. Es necesario que asiente bajo los muebles; de lo contrario, lejos de aportar todos los beneficios mecionados antes, hará que el espacio luzca pequeño y mal planeado.
4. No vestir tus paredes
Otro de los trucos básicos para darle personalidad a tu hogar es decorar las paredes. Puedes utilizar cuadros, láminas, o cualquier otro elemento decorativo.
La clave radica en aprender a hacer composiciones equilibradas en cuanto a tamaño y forma, guardando las proporciones con el resto del espacio. La elegancia del ambiente dependerá del tipo de piezas que elijas. Mira esta preciosidad de Joana Santamans que encuentras en Enou.
5. No te dejes llevar por las imitaciones
Cuando te decimos que se llevan los muebles y los complementos en acabado metálico, hablamos en forma literal. Te recomendamos que no te quedes con los que son de plástico o de otros materiales pintados en color dorado.
El latón, por ejemplo es una excelente idea para decorar tus ambientes de una manera muy sofisticada. ¿Qué te parece esta lámpara de sobremesa de Planeta Huerto?
6. El animal print hace que tu casa luzca sin estilo
Los estampados, en general, son delicados. La mayoría resulta encantador en pequeñas dosis, pero si te pasas, el efecto es desastroso. Esto sucede de manera muy especial con el estampado animal de tigre, leopardo, cebra… todos ellos pueden ser interesantes en algún detalle, pero nada más.
7. Una mala iluminación
La iluminación es clave de muchas cosas. Aporta calidez, da armonía a cada una de las zonas y embellece más allá de las luminarias que hayas puesto.
Así pues, iluminar incorrectamente un espacio puede restarle más estilo del que te imaginas. Por ejemplo, piensa cómo luciría tu salón con unas luces frías, directas, como las de un supermercado… Fatal, ¿no?
Para evitar que tu casa luzca sin estilo, no necesitas gastarte una fortuna decorándola, más bien debes pensar en los detalles y en los acabados que vas a elegir.
Cuando lo haces con cabeza, logras una combinación ganadora; de lo contrario, tu hogar puede parecer que acaba de salir del peor catálogo de venta de muebles.
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