5 tipos de separadores de espacios

Para separar las partes de una habitación, podemos emplear estos recursos como medio para crear un toque más personalizado y singular.
5 tipos de separadores de espacios
Francisco Jiménez

Escrito y verificado por el historiador del arte Francisco Jiménez.

Última actualización: 02 enero, 2021

En el mundo de la arquitectura, no solo se utilizan los muros como medio para diferenciar las estancias; también existen otras posibilidades que pueden sustituir, en cierta medida, a las paredes. Por eso, vamos a conocer 5 tipos de separadores de espacios.

A todos nos gusta tener nuestro rincón de lectura, un lugar para estar a solas o, simplemente, un medio para diferenciar las partes. Es conveniente que exista un sistema de organización interna que trate de proporcionar, a su vez, una estética definida.

En este sentido, es importante que valoremos algunos recursos que pueden servir para la estructuración de los interiores. La idea es que se alcance cierto grado de distinción; incluso que se llegue a generar un ambiente cómodo y apacible.

1. El biombo de madera, un elemento clásico que vuelve a estar de moda

5 tipos de separadores de espacios

Uno de los componentes que vuelven a estar de moda son los biombos. Es posible que no nos planteemos disponer uno de ellos en el dormitorio o el salón, pero puede llegar a producir un efecto visual muy interesante y favorecer la decoración.

Hoy en día, los hay de diferentes tipologías, pero es el de madera el que ha vuelto a tener gran relevancia. Los hay opacos que permiten una separación bien definida y, por otro lado, se encuentran los calados cuyas formas pueden tener diseños realmente peculiares.

Los listontes intercalados con huecos entremedias son una buena opción. De este modo, se puede vislumbrar ligeramente lo que hay al otro lado; es decir, se insinúa lo que nos podemos encontrar en la otra parte de la habitación.

Los biombos nos recuerdan a épocas pasadas.

2. Vitrales para que traspase la luz

Otra de las soluciones más efectivas es el uso de los vitrales que permiten el paso de luz y no generan ese nivel de opacidad tan fuerte como para que se perciba esa sensación de hermetismo. Se pueden considerar, entonces, una opción apropiada para lograr un tratamiento más original.

  1. Una de las categorías más demandadas son los semitrasparentes. Se conforman, generalmente, por planchas de metacrilato de superficie plana y lisa.
  2. En el caso de que queramos tener uno con diseños superficiales, son muy comunes los que tienen formas vegetales, figurativas o geométricas. De esta manera, se consigue un carácter diferente y una temática que resulta completamente singular.
  3. No debemos olvidar los vitrales tintados a modo de vidrieras, aquellos que poseen dibujos y formas con tonalidades diversas. Es una manera de aportar un toque de color al espacio.

3. Estanterías a modo de separadores

Separadores: estanterías

A la hora de hablar de los separadores de espacios, no podemos olvidarnos de las estanterías. Con ellas se puede trabajar fácilmente la diferenciación de partes dentro de una misma habitación.

Sobre ellas se pueden colocar libros, objetos y otros elementos con el fin de conseguir un atisbo de separación. Esto nos permite crear un rincón específico que garantice la privacidad para poner una mesa, una butaca o unas sillas.

En otras palabras, estamos creando una pequeña estancia sin la necesidad de que esta se encuentre cerrada del todo; de hecho, se conectan con el resto del espacio de una forma directa sin perder la intimidad.

4. Los separadores de ambientes, una nueva tendencia

¿Quién ha dicho que para separar las habitaciones es preciso levantar un muro? Existen en el mercado los separadores de ambientes. Suelen ser de madera, forja, metacrilato, etc., y se convierten en una pieza más de la decoración que garantiza la privacidad.

No se consideran una estructura que clausure o que provoque inaccesibilidad, pero sí permiten liberar alguna de las partes de la habitación. Son muy comunes en salones, precisamente porque son lugares amplios donde se pueden trabajar este tipo de recursos.

Ha llegado el momento de darle un toque más innovador al hogar.

5. Critaleras trasnparentes como separadores de espacios

En el caso de que queramos ofrecer una imagen más sofisticada y clásica, tenemos la oportunidad de incorporar cristaleras de gran tamaño, hechas con marcos de metal y, si se desea, con puertas de apertura.

Ante esta situación, nos encontramos con cierta delimitación de las partes, de una forma mucho más consolidada, pero que permite la visualización de lo que hay al otro lado.

Gracias a este recursos, se permite el acceso de la iluminación de una forma mucho más directa. Se enriquece, así, todo el espacio y se favorece la idea de diafanidad.



  • Gilliatt, Mary: El libro de la decoración, Folio, 1986.
  • Margolius, Marcia: Espacios para vivir, Ceac, 2006.